P17. Mas estas cosas sucedieron como ejemplos para nosotros, para que no codiciemos I cosas malas, como ellos codiciaron. Ni seáis idólatras II, como algunos de ellos, según está escrito: Se sentó el pueblo a comer y a beber, y se levantó a jugar. Ni forniquemos III, como algunos de ellos fornicaron, y cayeron en un día veintitrés mil. Ni tentemos al Señor IV, como también algunos de ellos le tentaron, y perecieron por las serpientes. Ni murmuréis V, como algunos de ellos murmuraron, y perecieron por el destructor. (1. COR: 10:6-10).
I. CODICIA: Deseo vehemente de poseer muchas cosas, especialmente riquezas o bienes (Oxford Languages). Es el afán desmedido e interminable por tener riquezas y bienes terrenales (RAE). La codicia en este sentido comporta un deseo impetuoso de posesiones, bien sea materiales (riqueza, propiedades, bienes y demás), o inmateriales (estatus, poder, influencia, posición, placeres). El codicioso ambiciona tener más de lo que necesita para vivir. Pone su corazón en lo que desea con tanta intensidad que, usualmente incurre en conductas y comportamientos al margen de la moralidad y la legalidad para conseguir lo que es objeto de su codicia.
II. IDOLATRÍA: Adoración que se da a los ídolos (RAE). Amor y admiración excesivos que se sienten por una persona o por una cosa (Oxford Languages). Adoración, culto o servicio que se tributa a entidades, objetos, imágenes, sucesos naturales o cualquier elemento que se considere dotado de poder divino. También denota un sentido espiritual para expresar formas exasperadas de admiración, reverencia, fervor, devoción o entrega a cualquier cosa o experiencia diferente de Dios. Buscar significado en las cosas creadas, y, entregar lealtad, respeto, veneración o amor a esas cosas. Es posible convertir las posesiones materiales, las riquezas, el nivel social, el grado de instrucción, la familia, la procedencia étnica, el conocimiento, etcétera, en un ídolo colocado sobre el altar de la vida para rendirle adoración, culto o servicio.
♦ FETICHE: Ídolo u objeto de culto al que se atribuyen poderes sobrenaturales, especialmente entre los pueblos primitivos (RAE). Figura o imagen que representa a un ser sobrenatural al que se atribuye el poder de gobernar una parte de las cosas o de las personas, y al que se adora y se rinde culto. Objeto al que se atribuye la capacidad de traer buena suerte a quien lo usa o lo posee (Oxford Languages). Especifica la adoración, culto o servicio a cualquier objeto tangible, palpable, real o material, al cual se le atribuyen cualidades, atributos o propiedades sobrenaturales, mágicas o divinas. En ese concepto, la práctica del fetichismo concede la posición de ídolo al objeto involucrado lo que representa idolatría flagrante.
III. FORNICAR: Tener ayuntamiento o cópula carnal fuera del matrimonio (RAE). Relación sexual, coito o acceso carnal entre un hombre y una mujer que no están unidos en matrimonio. En ese sentido, la única razón de la fornicación es satisfacer los deseos físicos de los involucrados, pero, sin ningún tipo de compromiso legítimo entre las partes. El término fornicar también alcanza cualquier tipo de inmoralidad o disidencia sexual como: adulterio, pornografía, masturbación, promiscuidad, incesto, homosexualismo masculino y femenino, bestialidad, fantasías sexuales ilícitas, pedofilia, prostitución, practica contranatural, entre otros. (CB. Matthew Henry 1999).
IV. TENTAR: Probar a alguien, haciendo examen de su constancia o fortaleza (RAE).
♦ TENTAR AL SEÑOR DIOS: Dudar o desconfiar rotundamente de su poder y ayuda (BDE. Palabra Clave 2016). También se entiende como provocar y desagradar al Creador cometiendo pecado voluntariamente. Abusar de la misericordia y paciencia del Todopoderoso pensando que se puede desafiar sus mandamientos sin esperar recibir la retribución debida. A riesgo propio olvidamos que el mismo Dios que nos ama con amor eterno, también es Santo y no tolera el pecado en ninguna de sus formas, mucho menos el pecado intencional de sus hijos. Siempre será una mala idea tentar a Dios.
V. MURMURAR: Hablar entre dientes, manifestando queja o disgusto por algo. Conversar en perjuicio de un ausente, censurando sus acciones (RAE). Hablar en voz muy baja, en especial manifestando una queja o un disgusto por alguna cosa. Hablar mal de una persona que no está presente (Oxford Languages). Murmurar es una de las actitudes tóxicas más habituales y populares en la humanidad. Implica criticar o hablar mal de una persona cuando no está presente. En muchos casos, esto deriva en una situación de hipocresía y chisme ya que el murmurante no expresa realmente su forma de pensar delante de ese alguien de quien murmura. Además, revela un espíritu desconfiado y descontento que aumenta y propicia el caos. No olvidemos que también es posible caer en murmuraciones respecto de Dios. (CB. Matthew Henry 1999).
Ahora bien, la murmuración puede ser activa como pasiva:
a. Es activa cuando existe interacción verbal directa e intención concreta de las partes murmurantes respecto de un asunto.
b. Es pasiva cuando alguien guarda silencio frente a la murmuración, pero, presta oídos ansiosos y se deleita en la misma.