P4. A algunos I que dudan II, convencedlos III. A otros IV salvad V, arrebatándolos del fuego VI y de otros VII tened misericordia VIII con temor IX aborreciendo X aún la ropa contaminada por su carne XI. (JUDAS 1:22, 23).
I. En primer lugar, tenemos al grupo de los que dudan, es decir, aquellos que prestaron oídos negligentes a las falsas enseñanzas y fueron influenciados negativamente. En consecuencia, parecen desanimarse, presentar inseguridades, cuestionamientos o incertidumbres respecto de la fe en Jesucristo. Con estos, hay que ejercitar el convencimiento sustentado, razonable y argumentativo de la fe. A saber, ocuparse tanto en oración como en dedicación del tiempo necesario para socorrerlos espiritualmente o doctrinalmente, además de procurar alejarlos de la influencia de apóstatas manifiestos, falsos creyentes o falsas doctrinas.
II. DUDA: Suspensión o indeterminación del ánimo entre dos juicios o dos decisiones, o bien acerca de un hecho o una noticia. Vacilación del ánimo respecto a las creencias religiosas. Desconfiar o recelar de alguien o algo (RAE). Vacilación o falta de determinación ante varias posibilidades de elección sobre creencias, noticias o hechos (Oxford Languages). Estar dividido entre diferentes opciones de pensamiento, los cuales, podrían resultar en alguna indecisión, vacilación o inseguridad mental. En contexto, la duda es equivalente a la no confianza en Dios, esto, en sus diferentes matices y tonalidades. En otras palabras, la duda revela una incertidumbre que cuestiona la bondad de Dios y Su provisión generosa.
III. CONVENCER: Incitar, mover con razones a alguien a hacer algo o a mudar de dictamen o de comportamiento (RAE). Conseguir con razones y argumentos que una persona actúe o piense de un modo determinado (Oxford Languages). Persuadir, conseguir que una persona crea o se decida a hacer algo https://www.wordreference.com/definicion/convencer.
IV. En segundo lugar, tenemos a los que fueron ya seducidos por las herejías, estos están “envueltos por el fuego del pecado” y es bastante probable que no quieran abandonar ese camino, ya que a buen seguro, se ajusta a sus conveniencias y deseos. No obstante, no hay que perder las esperanzas, por el contrario, hay que redoblar esfuerzos y dedicarles aún más tiempo para rescatarlos y “arrancarlos del fuego que los envuelve”. Esto, sin olvidar la prudencia, ubicación y discreción adecuada.
V. SALVAR: Librar de un riesgo o peligro, poner en seguro. Evitar un inconveniente, impedimento, dificultad o riesgo (RAE). Librar a una persona o a una cosa de un peligro o de una amenaza, o solucionar un problema grave o una situación difícil o comprometida (Oxford Languages). No es que un creyente pueda salvar a otros, pero, si, puede ser herramienta intencional para ministrar salvación a otras personas.
VI. ARREBATAR: Quitar con violencia y fuerza (RAE). Quitar una cosa a una persona con violencia o con rapidez (Oxford Languages). Judas hace un uso positivo de este término para enfatizar la acción contundente y eficaz hacia aquellos que ya están en medio de las brasas heréticas.
VII. Por último, tenemos al tercer grupo, estas personas contumaces no quieren saber más nada de la verdad, incluso, podrían manifestar agresividad verbal y física hacia los creyentes que pretendan ayudarlos en su descarrío. Aun, en ese estado de contaminación se debe ejercitar la misericordia y estar dispuestos a ayudarlos. Sin embargo, hay que mantener la guardia alta, ya que, así como la ropa limpia tipifica la pureza, la rectitud, la justicia, el decoro, y el fruto del Espíritu, la ropa sucia, simboliza la impureza la injusticia, el libertinaje, la disolución y toda clase de conductas pecaminosas, las cuales son muy contagiosas.
VIII. MISERICORDIA: Virtud que inclina el ánimo a compadecerse de los sufrimientos y miserias ajenos (RAE). Inclinación a sentir compasión por los que sufren y ofrecerles ayuda (Oxford Languages). Es la capacidad de compadecerse por los que padecen necesidad de algún tipo y brindarles apoyo practico y efectivo. La misericordia puede manifestarse de diversas formas, sea por medios materiales como; dar albergue, dar de comer, dar de beber, vestir al que no tiene, entre otros, y, en el ámbito espiritual, por ejemplo; enseñar, escuchar, aconsejar, consolar, reconfortar, orar a Dios por el bienestar del prójimo en dificultades, etcétera. En ocasiones, la palabra misericordia es confundida con la expresión lástima, la cual, involucra enternecimiento, pena o tristeza generados en alguien respecto de los males de otras personas. Es decir, es una emoción temporal y no procura un acto bondadoso eficaz para socorrer a los demás en sus problemas, en cambio, la misericordia es la capacidad de sentir la desdicha de los demás y ofrecerles ayuda en su situación. Todo dentro de un criterio razonable y en sintonía con la capacidad económica y espiritual de cada cual.
IX. TEMOR: Pasión del ánimo, que hace huir o rehusar aquello que se considera dañoso, arriesgado o peligroso. Presunción o sospecha. Recelo de un daño futuro. (RAE). Sospecha de que algo es malo o puede conllevar un efecto perjudicial o negativo (Oxford Languages).
♦ CAUTELA: Precaución y reserva con que se procede (RAE). Cuidado y reserva de una persona al hablar o actuar para prevenir un daño o un peligro (Oxford Languages).
X. ABORRECER: Tener aversión a alguien o algo (RAE). Detestar enormemente algo o a alguien (Oxford Languages). Odiar, detestar, abominar, aburrirse de alguien o de alguna situación (Diccionario enciclopédico bíblico ilustrado, Clie, 2017). Odiar, sentir disgusto por. (Diccionario teológico del NT: Kittel, Gerhard/ Friedrich, Gerhard/ Bromiley, Geoffrey W. 1973).
XI. Está clase de servicio exige mucho amor, dedicación y paciencia, ya que los “creyentes” poco maduros muchas veces son como niños indisciplinados. Entonces, no debiera sorprendernos que expresen rebeldía u obstinación. Por otra parte, es importante mencionar que los que lleven adelante este cometido deberán disponer de un ejercitado y solvente conocimiento de las principales doctrinas que involucra el evangelio. No está de más mencionar la triste posibilidad de que algún cristiano con buenas intenciones y mucho entusiasmo, pero, con una tenue base bíblica, tenga una actuación contraproducente en alguno de los escenarios tratados. Mantener siempre buen juicio, prudencia, serenidad, reflexión, sensatez y responsabilidad.