P4. Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia. Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia I ser hallados por él sin mancha II e irreprensibles III, en paz IV, V. (2. PED 3:13,14).
I. DILIGENCIA: Cuidado y actividad en ejecutar algo. Prontitud, agilidad, prisa. Poner todos los medios para conseguir un fin (RAE). Virtud dinámica con la que se combate la pereza (Diligencia – Wikipedia, la enciclopedia libre). Distingue a un individuo que imprime gran solicitud, esmero, eficacia, eficiencia y excelencia en la realización de sus trabajos, tareas o encargos. Una persona diligente es responsable y consecuente en sus compromisos y obligaciones. Además, demuestra capacidad y competencia para encontrar soluciones y salidas a los diferentes inconvenientes o dificultades. («Diligente». En: Significados.com. Disponible en: https://www.significados.com/diligente/ Consultado: 16 de septiembre de 2020, 10:15 am).
II. MANCHA: Señal que una cosa hace en un cuerpo, generalmente ensuciándolo o echándolo a perder. Parte de alguna cosa con distinto color del general o dominante en ella. Deshonra, desdoro (RAE). Señal o marca de suciedad en la superficie de una cosa. Parte de una cosa o zona de una superficie que destaca por tener un color o aspecto diferente al resto. (Oxford Languages).
♦ SIN MANCHA: El contexto hace referencia a los sacrificios que se ofrecían en el altar del templo de Dios en Jerusalén. Es decir, las ovejas o becerros que se presentaban como sacrificio por los pecados debían ser sin mancha o defecto (Levítico 22). Por lo tanto, La vida cristiana debiera ser de continuo sin defecto, deficiencia, reproche o incorrección moral alguna, de tal manera que pueda ofrecerse como sacrificio vivo al Creador. “Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional” (Romanos 12:1).
III. IRREPRENSIBLE: Que no merece reprensión (RAE). Que no puede ser reprendido o reprochado por considerarse correcta su conducta (www.thefreedictionary.com). También, describe un estilo de vida ausente de pecados, vicios o maldades, por lo tanto, sin necesidad de crítica, corrección o amonestación. La vida de un hijo de Dios debiera ser de ¡tal integridad moral! que nadie pueda reprochar o desaprobar algún aspecto de manera sensata o razonable. Esto no significa perfección en ninguna manera, ya que un creyente eventualmente pecará. Sin embargo, confesará su pecado, pedirá perdón, corregirá lo que deba corregir y avanzará con mayor cuidado, esmero y vigilancia el camino de la santificación. Ser irreprensible también involucra ser sincero y sin engaño. (CB. W. MacDonald, 2004), (CB. W. Barclay, 2006).
IV. En paz con Dios (Romanos 5:1), con nuestra conciencia (Hechos 24:16) y con nuestro prójimo en lo que a nosotros respecta y corresponde (Romanos 12:18).
V. PAZ: Relación de armonía entre las personas, sin enfrentamientos ni conflictos. Estado de quien no está perturbado por ningún conflicto o inquietud (RAE). Situación o estado en que no hay guerra ni luchas entre dos o más partes enfrentadas (Oxford Languages). Respecto del entorno, se define positivamente como una atmósfera en el cual confluyen el equilibrio y estabilidad entre los participantes. En ese sentido, no se debería escatimar esfuerzos por cultivarla, alcanzarla y mantenerla. La paz involucra plena intencionalidad de las partes que deseen conseguirla y preservarla. Los creyentes son llamados a este afán, es decir, deben hacer todo lo que esté en sus posibilidades para conservar la paz, aun cuando, se tenga que renunciar eventualmente a ciertas cosas legítimas secundarias por amor a los hermanos y en bienestar de la mayoría. Ahora bien, esto no quiere decir en ninguna manera transigir los fundamentos doctrinales, bajar los muros dogmáticos o diluir la palabra de Dios para hacerla más atractiva. Somos llamados a vivir en paz y amor, pero, si para lograrlo tenemos que ceder a las presiones seculares o permitir un evangelio adulterado, entonces no hay manera de sostenerla (1. Corintios 11:19).